Doma Natural de un caballo de trabajo. (Reining y Cow Horse) Cap. I

TBR Oaks Great Flash, es una de nuestras protagonistas.

En los últimos años hemos ido tratando distintos aspectos de la doma de los potros. En las primeras series vimos como iniciar un potro en sus relaciones con las personas desde el día de su nacimiento con el “imprinting”. Seguimos trabajando a ese potro en su manejo hasta el momento de la monta. Vimos como iniciarlo a la monta y sus primeros pasos por el campo. Posteriormente empezamos otra serie más específica del entrenamiento del caballo western, introduciendo ejercicios de trabajo de rancho y algunas maniobras básicas que utilizaríamos en el trabajo con el ganado. La última serie de artículos la dedicamos al entrenamiento para el trabajo con el ganado, sobre todo destinado al Team Penning, Ranch Sorting, etc. Disciplinas todas ellas de trabajo de rancho, si bien trabajando desde una base sólida que es el fundamento del Cow Horse.

Empezamos hoy una nueva etapa, podría pensarse que es similar a las anteriores y de algún modo es así. La novedad es que vamos a intentar explicar todo el proceso, desde los primeros contactos con el potro hasta su introducción en la competición, pero una de las novedades es que vamos a realizar todo el trabajo con los mismos protagonistas. Cada dos meses mostraremos el trabajo que hemos ido haciendo con las potras. Será un proyecto en paralelo entre NH y los lectores. Los artículos mostrarán el trabajo real durante todo el tiempo que dure el proceso de su entrenamiento. Estos artículos, en algunos casos se acompañarán de vídeos que harán más interesante el proyecto.

Para este proyecto contaré con la ayuda de mi hijo Juan, trabajaremos con dos potras American Quarter Horse, TBR Oaks Great Flash, que en este momento tiene cuatro meses. Es hija de Ml Great Spirit y de Flash Berry Lady y es la de mi hijo y la otra es TBR Shee’s Smart & Whiz, que tiene ahora tres meses. Es hija de Whiz Ruf Peppy  y de Smart Snappy Lena. Esta es para mí.

TBR Shee’s Smart & Whiz.

El trabajo lo realizaremos conjuntamente e indistintamente trabajaremos cada uno, una u otra potra según el caso.

Si hablamos e caballos de trabajo o de deporte, antes de entrar sobre su entrenamiento, es preciso señalar  la importancia de elegir un potro que tanto por sus orígenes como por su conformación física nos dé la impresión que puede servir para las tareas que tenemos pensado encomendarle. En este caso ambas potras tienen unos fantásticos orígenes tanto de Reining como de Cutting.

Otro de los aspectos esenciales para tener éxito en esta aventura que ahora iniciamos es permitir a nuestro potro vivir y desarrollarse en las condiciones adecuadas, en cada momento según su edad.

Flash con su madre Berry y con Hicky.

En este caso en concreto, empezaremos el trabajo más sistemático tras el destete. Hasta ese momento en que juntaremos a nuestras potras, han estado viviendo separadas pero en dos grupos distintos.

Para mí hay dos aspectos muy importantes paras la salud mental y física del potro. El primero que tenga la posibilidad de estar en grandes espacios y pastando, por lo menos algunas horas cada día. Eso le permitirá un desarrollo físico mucho mejor. Los potros necesitan correr y correr sin limitaciones, que puedan estirar bien sus músculos, tendones y ligamentos. Además poder pastar les mantendrá activos a la par que la madre dispondrá de una mejor calidad de la leche. El segundo aspecto al que me refería, es la necesidad de estar en un grupo, por lo menos con algún otro caballo además de su madre.

Flash jugando con Hicky

Si el potro se cría sólo con su madre no aprenderá muchos de los aspectos necesarios para una buena relación social en el futuro, ya sea con otros caballos o con las personas. La madre no suele poner ningún límite a su espacio, por lo que los potros que se crían solos con su madre suelen ser irrespetuosos e invasivos. Tienen que aprender el respeto al espacio y también con el juego aprenderán a coordinarse con otros.

En nuestro caso, TBR Oaks Great Flash (en adelante Flash) vive además de con su madre con Hicky, una yegua de 18 años. TBR Shee’s Smart &Whiz (en adelante Smart) vive con otro potro de tres meses y la madre de este.

Smart con su madre y uno de sus compañeros de manada.

Hasta el momento del destete en que pondremos a las dos potras juntas, voy a explicaros lo que hemos hecho hasta ahora. Simplemente hemos intentado que las potras nos vean de una forma sencilla como unos miembros más del grupo. Desde su nacimiento hemos pasado algunos minutos cada día acariciando y cepillando a sus madres. Al principio por simple curiosidad las potras se acercan a vernos y a olernos. Sólo hay que permitir que lo hagan y poco a poco, día tras día las potras cogen confianza y aprecian nuestra compañía.

En el caso de Flash, empezamos el trabajo día de su nacimiento, lo que se conoce por algunos como Imprinting. No lo hicimos en cambio con Smart. En este vídeo se puede ver la primera sesión de trabajo con Flash. Tras una semana donde repetimos el trabajo de acariciarla, ya la soltamos al prado con su madre. Es verdad que con ella seguimos trabajando durante este periodo cosa que no hicimos con Smart por estar más alejada de casa. Con ella empezaremos en el momento del destete.

https://www.youtube.com/watch?v=z3osJDUujjo&feature=youtu.be

Tanto en el corral como en los prados, permitiremos que se acerquen y les ofreceremos nuestras caricias. En ningún momento trataremos de sujetarlas pues sólo conseguiremos que traten de huir de la presión, si huyen no es bueno, ya que no queremos que nos teman, y si las sujetamos para que no lo hagan tampoco lo es mucho, pues podemos perder algo de la confianza que teníamos ganada. En esta primera fase hay que ser muy paciente y dejar que el tiempo madura la relación. Si no tenemos prisa veremos como en pocas semanas nuestros potros nos buscan, disfrutan de nuestras caricias y no resulta ningún problema ponerles la cabezada.

Es más fácil que se acerquen a nosotros si nos agachamos y nos ponemos a su altura. De otro modo cuando se acercan mucho parte de nuestro cuerpo sale de su campo visual.

Cuando empezamos con las potras se dio la circunstancia que Juan estaba convaleciente de una grave lesión en su pelvis, por lo que durante unos meses tuvo que hacer el trabajo apoyándose en sus muletas y sin mucha movilidad. Esta circunstancia la señalo por que ha sido muy interesante ver cómo se puede trabajar con un potro a pesar de tener grandes limitaciones de movilidad.

En el próximo capítulo veremos como hacemos el destete de las potras, y como aprovechamos ese momento para reforzar nuestros lazos de confianza con ellas.